100 g de guisantes secos (en tiendas orientales)
1 sobre de preparado de falafel (en El Corte Inglés)
pan rallado
comino molido
hojas de ensalada
12 tomates cereza
4 panes de pita
2 yogures griegos naturales
1 ramillete de menta fresca
zumo de limón
aceite de oliva virgen y sal.
Cocer los guisantes en agua con sal en una olla a presión hasta que estén tiernos (10-12 minutos). Escurrirlos y triturarlos formando una pasta. En un bol, mezclar el preparado de falafel con agua y agregar la pasta de guisantes secos; trabajar hasta obtener una mezcla homogénea. Aderezar con un poco de comino. Formar bolas como si fueran albóndigas, pasar por pan rallado y freír en abundante aceite caliente (los falafel deben quedar sumergidos en el aceite caliente). Escurrirlos sobre papel absorbente. Batir el yogur con la menta picada. Añadir unas gotas de zumo de limón y un chorrito de aceite. Calentar los panes de pita en el microondas. Abrirlos y rellenarlos con unas hojas variadas de ensalada, unos tomatitos troceados y dos falafel. Aliñarlos con la salsa de yogur (a la que, opcionalmente, se le puede agregar una pizca de ajo majado para levantar el sabor).
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