Sopa de remolacha

La remolacha, también conocida con el bello nombre de betabel, es una planta con una raíz homónima que se consumía en tiempos inmemoriales como medicamento para combatir dolores de cabeza y dentales. No fue hasta la época de los romanos cuando estos comenzaron a comer las raíces, aunque la costumbre se perdió en Europa y no volvió a la dieta de los europeos hasta el siglo XVI, concretamente en Alemania e Inglaterra. Hoy día se consume en toda Europa, y se cultiva en países como Francia, Italia y España.
El sabor de la remolacha es dulce y, a la vez, terroso. Es un alimento con pocas calorías y es fuente de proteínas, fibra y potasio.

Importante
Aunque en la receta presentamos la sopa caliente, también puede servirse fría o templada en función de la época del año. ¡Siempre queda deliciosa!

Preparación
En un cazo ponemos el caldo de verduras con el puerro lavado y picado. Cocemos hasta que el puerro esté tierno y retiramos del fuego.
En una batidora o robot de cocina trituramos bien el caldo, el puerro y la remolacha que, previamente, habremos cortado en trozos pequeños. Si es necesario, pasamos la crema por un chino para que quede más fina y sin hebras. Salpimentamos y reservamos.
En el momento de servir calentamos la crema y añadimos el queso feta desmenuzado, las anchoas bien picadas y un poquito de eneldo fresco. Terminamos añadiendo unas gotitas de AOVE.

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