500 g de tomates verdes o poco maduros
100 g de harina normal de trigo
50 g de harina de maíz
1 huevo
125 g de yogur natural
50 ml de leche
Cayena en polvo
Sal
Pimienta
Lavamos los tomates y los cortamos en rodajas de 1 cm de grosor aprox. Los salamos y los colocamos sobre papel absorbente para que pierdan humedad. Batimos el huevo y lo mezclamos con el yogur y la leche. En un cuenco aparte, mezclamos las harinas, una pizca de sal, pimienta y cayena en polvo. Calentamos una sartén grande con aceite de oliva a fuego medio-alto. Pasamos las rodajas de tomate por la mezcla de huevo y yogur, escurrimos y rebozamos. Freímos los tomates y los posamos sobre papel. Los podemos acompañar de distintas salsas, como mayonesa, tomate, remoulade o yogurt.
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