Reseña:

Gulda, un brillante maestro del ritmo, intérprete de Bach intransigente y músico de jazz, está en la mejor línea de Chopin. Las obras de Chopin aparecen en los programas de conciertos de Gulda desde muy temprano. ¿Su secreto para interpretar a Chopin con tanta vitalidad? Es la mezcla inimitable de rigor rítmico, ternura más cantabile y arrebatos de emoción controlados. Aunque se convertiría en uno de los rebeldes más caprichosos de la música del siglo XX, tan enamorado de los espíritus libres del jazz como de los monumentos vivientes de la música clásica, el pianista Friedrich Gulda (1930-2000) nació y se crió en la más tradicional de las ciudades musicales, Viena.