Reseña:

Esta reedición de las cuatro sinfonías de Brahms, grabadas en 2005, continúa el credo artístico de Norrington de mantenerse lo más cerca posible de las expectativas del compositor. Una de las características principales, además del 'sonido puro' que no usa vibrato, son los tempos rápidos. Brahms no dejó indicaciones de metrónomo en sus sinfonías. Sin embargo, los tiempos generales que dejó el director de Brahms, Hans von Bülow, son tan cortos, en comparación con los de hoy, que no puede haber tempos muy lentos en sus interpretaciones. Norrington también consideró una de las muchas pistas dejadas por otro director admirado y amigo de Brahms, Fritz Steinbach: "Por supuesto, dirija la apertura de la Primera Sinfonía de Brahms en 6, pero debe sonar en 2." A German Requiem es una de las composiciones más populares de Brahms. Aunque los textos están tomados de la Biblia, la pieza no forma parte de ninguna tradición eclesiástica-litúrgica.