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El aguardiente es una de las bebidas alcohólicas más recurridas. Pocas son las casas que no tienen una botella de aguardiente en su despensa ya que además de ser buen digestivo, también es un remedio tradicional contra la gripe. El aguardiente se obtiene a partir del orujo y a menudo puedes tomarlo solo o combinado como otros coktails que podrás encontrar en cocktails listos para tomar. Sus aromas y su consistencia varían según el tipo y destaca por tener una gran persistencia y elegancia. ¡Hay tantos como puedas imaginar! Entre sus variantes más conocidas se encuentra el brandy, una de las opciones de bebida más interesantes para tomar antes o después de comer.
Procedente de los alquimistas árabes, el aguardiente se usó en un principio para crear perfumes. En occidente se tomó nota de ello y fueron otros alquimistas los que decidieron darle otro uso y extraer parte del vino para usarlo como remedio médico. Pero a día de hoy su utilización se ha extendido y además de como una bebida en sí misma, puedes encontrar aguardiente en muchos de los destilados que ya conoces ya que también es usado como base para la destilación de otras bebidas como el whisky, el vodka o también la ginebra. ¡Incluso el brandy!
Además de los destilados como el brandy, puedes alternar también el aguardiente con otros muchos licores y alcoholes. El anís, el licor de café y chocolate o el licor de crema y hierba son algunos de los aliados perfectos para realizar la digestión. Sólo tienes que elegir tu favorito y decidir cuál es el que mejor se adapta a tu cuerpo. Depende de si prefieres un sabor más dulce o amargo. Pero también hay quien prefiere los extremos y apuesta por el ligero dulce del brandy o el extremo amargo del tequila. ¿Con cuál de todos de quedas? Sea cuál sea tu decisión, aquí puedes consultar todos los tipos de aguardientes y orujos que tenemos para ti.
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